Querido amigo:
Tienes razón. Pero es solamente ante las majestades de la patria y del coraje que son ustedes solidarios y se respetan.
...Te declaro con toda franqueza que quisiera ser más optimista acerca de la suerte de ese país; pero no puedo, no puedo ver de color de rosa lo que se está poniendo de un gris muy oscuro. Creo que tengan ustedes las bellas condiciones de que me hablas, pero nada más positivo espero de ellas, desde que veo esa intelectualidad joven quemándose la cejas sobre amarillos mamotretos, empeñadas en desentrañar enseñanzas de las epopeyas de nuestra raquítica existencia americana, en vez de ocuparse de los hermosos problemas científicos que agitan las mentalidades contemporáneas, agrupada en pos de las tibias resecas del primer gaucho clásico que se les ocurre héroe, enarboladas a guisa de ideal, o de las piltrafas vivas de cualquier pseudo caudillo, tropero de pasiones, en lugar de estar con los que desde ahora trazan rumbos sobre el porvenir, desperdiciando en una subordinación lamentable de lo que vale a la insignificancia, toda su exuberante vitalidad!
No creo en ustedes, patriotas, guapos y politiqueros.
Tuyo.
Florencio Sánchez
Fragmento de Cartas de un flojo, año 1900
No hay comentarios:
Publicar un comentario