jueves, 29 de octubre de 2015

Mi corazón no puede con la carga


Mi corazón no puede con la carga
de su amorosa y lóbrega tormenta
y hasta mi lengua eleva la sangrienta
especie clamorosa que lo embarga.

Ya es corazón mi lengua lenta y larga,
mi corazón ya es lengua larga y lenta...
¿Quieres contar sus penas? Anda y cuenta
los dulces granos de la arena amarga.

Mi corazón no puede más de triste:
con el flotante espectro de un ahogado
vuela en la sangre y se hunde sin apoyo.

Y ayer, dentro del tuyo, me escribiste
que de nostalgia tienes inclinado
medio cuerpo hacia mí, medio hacia el hoyo.

(Orihuela, 30 de octubre de 1910 – Alicante, 28 de marzo de 1942)

viernes, 23 de octubre de 2015

Nocturno

Rafael Alberti en Punta del Este (1943)

Cuando tanto se sufre sin sueño y por la sangre 
se escucha que transita solamente la rabia, 
que en los tuétanos tiembla despabilado el odio 
y en las médulas arde continua la venganza, 

las palabras entonces no sirven son palabras. 
Manifiestos, artículos, comentarios, discursos, 
humaredas perdidas, neblinas estampadas, 
qué dolor de papeles que ha de barrer el viento, 

qué tristeza de tinta que ha de borrar el agua! 
Ahora sufro lo pobre, lo mezquino, lo triste, 
lo desgraciado y muerto que tiene una garganta 

cuando desde el abismo de su idioma quisiera 
gritar que no puede por imposible, y calla. 
Siento esta noche heridas de muerte las palabras.

diciembre 1902 - octubre 1999

viernes, 16 de octubre de 2015

No te he perdido a ti...




Usados en común: estaciones del año, libros y una música.
Las llaves, los boles de té, la panera, sábanas y una
cama.
Un ajuar de palabras, de gestos, traídos, empleados,
gastados.
Un reglamento de casa observado. Dicho. Hecho. Y
siempre alargada la mano.
De inviernos, de un septeto vienés y de veranos me he 
enamorado.
De mapas, de un poblacho de montaña, de una playa y de una cama.
Con fechas he hecho un culto, promesas he declarado
irrevocables,
he adornado un algo y he sido devota delante de una nada,
(-de un periódico doblado, de las cenizas frías, del
papel con un apunte)
impávida ante la religión, porque la iglesia era esta cama.
De la vista de un lago surgió mi pintura inagotable.
Desde el balcón había que saludar a los pueblos, mis
vecinos.
Junto al fuego de la chimenea, en la seguridad, mi
cabello tenía su color más intenso.
La llamada a la puerta era la alarma para mi alegría.
No te he perdido a ti,
sino al mundo.

 (25 de junio de 1926 - 17 de octubre de 1973)



De "Invocación a la Osa Mayor" Ediciones Hiperión 2001
Versión de Cacilia Dreymüller y Concha García

martes, 13 de octubre de 2015

Pienso en ti.



en lo oscuro

de la lluvia, mientras el atardecer
entra en su estuche me siento
a pensar en ti

la ciudad
sagrada que es tu rostro
tus mejillas pequeñas las calles
de las sonrisas

tus ojos
a medias ave
a medias ángel y tus soñolientos
labios donde flotan las flores del beso

y
hay esa dulce y tímida pirueta
tu pelo
y también

tu alma
de canción y danza. una estrella
única raramente amada
se pronuncia, y yo

pienso
en ti

(14 de octubre de 1894 – 3 de setiembre de 1962)



Versión de David Lagmanovich

Para la revista "La pecera" Nro. 7, 2004


viernes, 9 de octubre de 2015

Caudal


Dar es amar,
dar prodigiosamente
por cada gota de agua
devolver un torrente.

Fuimos hechos así,
hechos para botar semillas en el surco
y estrellas en el mar
y ¡ay! del que no agote,
Señor, su provisión
Y al regresar te diga:
¡Como alforja vacía
está mi corazón!

octubre 1899 - junio 1974

lunes, 5 de octubre de 2015

Tentación

No. De noche no. De noche
no, porque me miran ellas.
Sería un mudo reproche
el rubor de las estrellas.

Tan inocentes, tan puras,
con sus ojos ignorantes,
latiendo como diamantes
allá arriba en las alturas.

-Entonces, mira. Mañana
bajo el sol viejo y ardiente.
La luz ciega, muerde, aplana.
El alma duerme... y consiente.

-¿De día? No. Las estrellas
en el cielo están también.
¿No lo sabías? Sí. Ellas,
aunque invisibles, nos ven.