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jueves, 17 de julio de 2025

Yo no sé lo que busco eternamente


Rosalía de Castro / Manuel López Garabal. 1970

Yo no sé lo que busco eternamente
en la tierra, en el aire y en el cielo;
yo no sé lo que busco; pero es algo
que perdí no sé cuándo y que no encuentro,
aun cuando sueñe que invisible habita
en todo cuanto toco y cuanto veo.
Felicidad, no he de volver a hallarte
en la tierra, en el aire, ni en el cielo,
y aun cuando sé que existes
y no eres vano sueño!

Rosalía de Castro

viernes, 11 de julio de 2025

El instante




¿Dónde estarán los siglos, dónde el sueño
de espadas que los tártaros soñaron,
dónde los fuertes muros que allanaron,
dónde el Árbol de Adán y el otro Leño?

El presente está solo. La memoria
erige el tiempo. Sucesión y engaño
es la rutina del reloj. El año
no es menos vano que la vana historia.

Entre el alba y la noche hay un abismo
de agonías, de luces, de cuidados;
el rostro que se mira en los gastados

espejos de la noche no es el mismo.
El hoy fugaz es tenue y es eterno;
otro Cielo no esperes, ni otro Infierno.

Jorge Luis Borges

viernes, 4 de julio de 2025

A orillas del Olimar

Víctor Lima / ilustración de Federico Murro

Hay ríos que hoy son ausencias
en mi destino de andar y andar,
pero ninguno me dio esa cosa
que solo tiembla en el Olimar.

Vestida de azul profundo
su agüita cumba cantando va.
Qué lindo suena en las tardecitas
arrobaditas de zucará.

Cuando mueran los caminos
que sueñan, andando yo,
que junto al dulce Olimar querido
se vuelva tierra mi corazón.

Hay ríos que andan y sueñan
y cantan cumbas como el que más,
pero ninguno me dio esa cosa
que solo tiembla en el Olimar.

Hay cosas de vez en cuando
que sin quererlo me hacen pensar,
pues se me van corazón adentro
y allí se quedan, como a soñar.

Víctor Lima

viernes, 27 de junio de 2025

Por detrás de mi voz



Por detrás de mi voz
-escucha, escucha-
otra voz canta.
Viene de atrás, de lejos;
viene de sepultadas
bocas y canta.
Dicen que no están muertos
-escúchalos, escucha-
mientras se alza la voz
que los recuerda y canta.
Dicen que ahora viven
en tu mirada
(sostenlos con tus ojos,
con tus palabras,
sostenlos con tu vida,
que no se pierdan
que no se caigan)

Circe Maia 

viernes, 20 de junio de 2025

La Abuela


 "La abuela sacaba el mantel blanco y tendía la mesa bajo el emparrado, cerca de los jazmines, y alguien encendía la lámpara y era un rumor de cubiertos y de platos en bandejas, un charlar en la cocina, la tía que iba hasta el callejón de la puerta blanca para llamar a los chicos que jugaban con los amigos en el jardín de adelante o en la vereda, y hacía el calor de las noches de enero.

La abuela había regado el jardín y el huerto antes de que oscureciera y se sentía el olor de la tierra mojada, de los ligustros ávidos, de la madreselva llena de translúcidas gotas que multiplicaban la lámpara para algún chico con los ojos nacidos para ver esas cosas."

Julio Cortázar

viernes, 13 de junio de 2025

La sombra de mi alma


La sombra de mi alma
huye por un ocaso de alfabetos,
niebla de libros
y palabras.
¡La sombra de mi alma!
He llegado a la línea donde cesa
la nostalgia,
y la gota de llanto se transforma
alabastro de espíritu.
(¡La sombra de mi alma!)
El copo del dolor
se acaba,
pero queda la razón y la sustancia
de mi viejo mediodía de labios,
de mi viejo mediodía
de miradas.
Un turbio laberinto
de estrellas ahumadas
enreda mi ilusión
casi marchita.
¡La sombra de mi alma!
Y una alucinación
me ordeña las miradas.
Veo la palabra amor
desmoronada.
¡Ruiseñor mío!
¡Ruiseñor!
¿Aún cantas?

Federico García Lorca

viernes, 6 de junio de 2025

Gurí pescador


Una caña de bambú, un perro lanudo, un tarrito con lombrices... y entre los verdes juncos: las mojarras. Aún veo aquella tararira, lujosa como la vaina de un cuchillo de plata, ¡tan parecida al sueño de un gurí pescador!

... Hay un reino bajo el agua
-un sauce me lo contó-
Donde el Pejerrey escucha
Y canta el Bagre Cantor...

En la taipa de un azude
Yo vi un gurí pescador
Que confundiendo a las piavas
Les cantaba esta canción:

"Tararira, Tararira
Qué arisca y sabia que estás
Anzuelo que cae al agua
Mojarra que te llevás...

Pica, pica Tararira
Plata viva del juncal...
Mientras no se corte el hilo
Junto al agua me hallarás!"

Y yo, que crecí en silencio
Bajo los sauces del Yí
Cobrizo de soles largos
Comprendo bien al gurí...

Osiris Rodríguez Castillos

viernes, 30 de mayo de 2025

Para qué sirve la lectura




Me llaman de una editorial
y me piden que escriba
cinco folios sobre la necesidad de la lectura
No pagan muy bien
¿quién podría pagar bien por un tema así?
pero de todos modos
necesito el dinero
así que enciendo el ordenador y me pongo a pensar
sobre la necesidad de la lectura
pero no se me ocurre nada
es algo que seguramente sabía cuando era joven
y leía sin parar
leía en la Biblioteca Nacional
y en las bibliotecas públicas
leía en las cafeterías
y en la consulta del dentista
leía en el autobús y en el metro
siempre andaba mirando libros
y me pasaba las tardes en las librerías de usados
hasta quedarme sin un duro en el bolsillo
tenía que volver a pie a casa
por haberme comprado un Saroyan o una Virginia Woolf
Entonces los libros parecían la cosa más importante de la vida
fundamental
y no tenía zapatos nuevos
pero no me faltaba un Faulkner o un Onetti
una Katherine Mansfield o una Juana de Ibarbourou
ahora la gente joven está en las discotecas
no en las bibliotecas
yo me hice una buena colección de libros
ocupaban toda la casa
había libros en todas partes
menos en el retrete
que es el lugar donde están los libros
de la gente que no lee
a veces tenía que seguirle durante mucho tiempo
las huellas a un libro que había salido en México
o en París
una larga pesquisa hasta conseguirlo
No todos valían la pena
es verdad
pero pocas veces me equivoqué
tuve mis Pavese mis Salinger mis Sartre mis Heidegger
mis Saroyan mis Michaux mis Camus mis Baudelaire
mis Neruda mis Vallejo mis Huidobro
para no hablar de los Cortázar o de los Borges
siempre andaba con papelitos en los bolsillos
con los libros que quería leer y no encontraba
por allí andaban los Pedro Salinas y los Ambrose Bierce
la infame turba de Dante
pero ahora no sabía decir para qué maldita cosa
servía haber leído todo eso
más que para saber que la vida es triste
cosa que hubiera podido saber sin necesidad de leerlos
Cuando habían pasado cinco horas yo todavía no había escrito
una sola línea
así que me puse a escribir este poema
Llamé a los de la editorial
y les dije creo que para lo único que sirve
la lectura
es para escribir poemas
no puedo decirles más que eso
entonces me dijeron que un poema no servía,
que necesitaban otra cosa.

Cristina Peri Rossi


viernes, 23 de mayo de 2025

Hueso

El grito / Oswaldo Guayasamín

Curiosa es la persistencia del hueso
su obstinación en luchar contra el polvo
su resistencia a convertirse en ceniza

La carne es pusilánime
Recurre al bisturí a ungüentos y a otras máscaras
que tan sólo maquillan el rostro de la muerte

Tarde o temprano será polvo la carne
castillo de cenizas barridas por el viento

Un día la picota que excava la tierra
choca con algo duro: no es roca ni diamante

es una tibia un fémur unas cuantas costillas
una mandíbula que alguna vez habló
y ahora vuelve a hablar

Todos los huesos hablan penan acusan
alzan torres contra el olvido
trincheras de blancura que brillan en la noche

El hueso es un héroe de la resistencia

Oscar Hahn

viernes, 16 de mayo de 2025

Anda un amigo en medio de la noche...


Anda un amigo en medio de la noche.
Han cerrado los bares. Las persianas
de acero bajaron con estrépito. Los gatos
deslizan apetitos. Anda la luna
por ahí, velada. Pasan coches y luces;
sobreviene, después, un silencio
que mueve la plantita en la cornisa;
silencio que hace un chambelán
de un grillo -del canto de ese grillo-.
Anda un amigo en medio de la noche.
No lo conozco. Y él no me conoce.
Andamos cerca o lejos, nos cruzamos
-acaso- en una calle. Compartimos
un ómnibus, un cine, un banco de una plaza.
Anda un amigo y ando yo que soy amigo
de ese hombre. En órbitas distintas
-nunca ajenas-. Pero vamos a hallarnos.

En medio de la noche o con la aurora
de rosados dedos, vamos a hallarnos.
Y tenemos que estar preparados a ese encuentro.
Por ahora, susurra el viento oscuro,
graznan letreros viejos y el grillo mete lima.
Ya no pasan los coches. Pasan restos de diarios
y un cartel liberado zapateando en el polvo.
Estoy seguro. Nos encontraremos.

Washington Benavides

viernes, 9 de mayo de 2025

El barrio



Volver al barrio siempre es una huida
casi como enfrentarse a dos espejos
uno que ve de cerca / otro de lejos
en la torpe memoria repetida

la infancia / la que fue / sigue perdida
no eran así los patios / son reflejos /
esos niños que juegan ya son viejos
y van con más cautela por la vida

el barrio tiene encanto y lluvia mansa
rieles para un tranvía que descansa
y no irrumpe en la noche ni madruga

si uno busca trocitos de pasado
tal vez se halle a sí mismo ensimismado /
volver al barrio siempre es una fuga

Mario Benedetti

viernes, 2 de mayo de 2025

De otro tiempo




Mi padre hacía carbón,

mi madre lavaba ropa;

qué musical era el monte

y el agua qué rumorosa.


Con el carbón de mi padre

los pobres no tenían frío,

con el lavar de mi madre

los ricos andaban limpios.


Con oficios tan humildes

ellos tuvieron sus logros:

hacer feliz a otro pobre

y a los ricos, ostentosos.


La gente de aquellos tiempos

como mis padres pasaron…

pero entonces yo era un niño

y de allá vengo a contarlo.


Enrique Amado Melo

viernes, 25 de abril de 2025

Minas y abril


Soy fruto de los cerros
Mi cuna fue de piedra
Y mi tumba será también, sin duda
Algún rincón soleado de la sierra
Nací, crecí como el clavel del aire
Prendido entre las grietas
De esas piedras pizarras de mi pago
De aquel bravo y arisco Lavalleja
Minuano, donde tú vayas
No te canses de decir
Que si Dios baja a la tierra
Por el altar de la sierra
Baja en Minas y en abril
Negra tierra labrantía
Naranja nubes de abril
Verde luz de los sauzales
Y en las cañadas añil
Por las calles oro viejo
Los cerros pizarra y gris
Si te gustan los colores
Mira el prisma de esas flores
Cuando las florece abril
Nunca más limpios los aires
Atardecer de jazmín
Ven que la luna creciente
Con aguas del Penitente
Llena su copa en abril
Me adormecí con cantos de chicharras
Volé en las tijeretas
Y le corte a la noche de mi pago
Para el recuerdo, su mejor estrella
Bajé y trepé los espinazos duros
De las quebradas nuestras
Y entre las medias luces de la tarde
Recorté de horizonte mi silueta
Nunca más limpios los aires
Nunca más claro el perfil
Y ese temblor de horizontes
Y amarillo de esos montes
Cuando los madura abril
De ennoviarla en el otoño
No te vas a arrepentir
La hizo novia el Arequita
Minas por siempre bonita
Pero más linda en abril

Santiago Chalar y Santos Inzaurralde

viernes, 11 de abril de 2025

No te asomes



No te asomes
a la ventana,
que no hay nada en esta casa.
Asómate a mi alma.

No te asomes
al cementerio,
que no hay nada entre estos huesos.
Asómate a mi cuerpo.

Miguel Hernández

viernes, 4 de abril de 2025

La Avenida de los Tilos


Ayer he caminado más que sola,
ayer he caminado sin vos,
y estaba la Avenida de los Tilos
tan largamente triste, que pensé:
¿en qué país estoy? Si estoy sin vos,
¿en qué país, hecho de desamor?
Ayer he caminado más que sola,
ayer he caminado sin vos,
y estaba la avenida como un río
de otro país tan pobremente frío,
tan largamente triste, que pensé
que el otoño es igual que el desamor.
Ayer he caminado sin vos,
y todo lo que he visto no lo he visto;
apenas he mirado, porque tuve
mucho miedo aquí en el corazón.
Ayer he caminado más que sola,
ayer he caminado sin vos,
y estaba la Avenida de los Tilos
tan largamente triste, que pensé:
¿en que país estoy, de este color,
de este color de caminar sin vos?

María Wérnicke

viernes, 28 de marzo de 2025

Olores

La lechera / Johannes Vermeer 


Casa, el olor a casa,

a tiempo que se fue de la mano,

a la mano que busca

entre las sombras la sombra

de su cuerpo, el pan casero.

Olor a agua, al agua

que habita en un lugar

donde las sombras andan

por adentro de todas las sombras.

Con sólo olor debiera ser posible

hacer el sol, luego una luna,

las estrellas, una mano y

si el tiempo alcanza, una casa

visible, un pan casero.


Salvador Bécquer Puig

viernes, 21 de marzo de 2025

El nido

 

Mi cama fue un roble
Y en sus ramas cantaban los pájaros
Mi cama fue un roble
Y mordió la tormenta sus gajos.
 
             Deslizo mis manos
Por sus claros maderos pulidos,
Y pienso que acaso toco el mismo tronco
Donde estuvo aferrado algún nido.
 
             Mi cama fue un roble.
Yo duermo en un árbol.
En un árbol amigo del agua,
Del sol y la brisa del cielo y el musgo,
De lagartos de ojuelos dorados
Y de las orugas, de un verde esmeralda.
 
             Yo duermo en un árbol.
¡Oh, amado!, en un árbol dormimos.
Acaso por eso me parece el lecho
Esta noche, blando y hondo cual nido.
 
 Y en ti me acurruco como una avecilla
Que busca el reparo de su compañero.
¡Que rezongue el viento, que gruña la lluvia!
Contigo en el nido, no sé lo que es miedo.

Juana de Ibarbourou